Las intervenciones espontáneas y no tanto de los artistas urbanos que se apropian de elementos del espacio público para inscribir sus obras, invaden nuestro territorio común de nuevos significados. Juegan con el espectador, bien para provocar una reflexión,  o para dar una simple mirada simpática o irónica del entorno. 

Así, el artista ofrece una respuesta estética, en un lenguaje significativo y poético que se sintetiza en soluciones prácticas para fortalecer la identidad colectiva y el sentido de pertenencia: generan una experiencia urbana que nunca es indiferente.  Aquí algunos pocos documentos.